Gladiador II ha despuntado con fuerza en la taquilla y en el gusto generalizado de la crítica. En países como España, la película se ha consolidado como el segundo mejor estreno del año, y su recaudación a nivel internacional es de nada más y nada menos que 87 millones de dólares hasta el corte. Nada mal. La épica nueva entrega ambientada en la cruenta Roma del año 211 d.C. ha llamado la atención, no sin algunas polémicas que todo filme popular trae consigo al tener los reflectores encima. Hoy, te revelamos algunos de esos debates que ha generado Gladiador II, la apuesta —que parece ganada— de Ridley Scott.
Hip Hop en Gladiador II, polémica a la carta
En la cinta original de Gladiator, el creador de scores Hans Zimmer y la excelsa cantante de Dead Can Dance, Lisa Gerrard, compusieron la música incidental, fueron nominados al Óscar y a un premio BAFTA y ganaron el Globo de Oro. Sobra mencionar que su herencia es un de los soundtracks más aclamados. Ahora, la polémica está servida porque al menos en el trailer, se usó una canción de rap musicalizando el avance, y de paso, rompiendo con la atmósfera épica de la cinta. No Church in the Wild, es la canción de 2011 que hoy forma parte de la promoción de Gladiador II. Si bien el trailer donde se incluye la canción tuvo millones de vistas, éstas generaron más dislikes que likes, lo cual es muy revelador: al público no le gustó que la ambientación histórica de la película tuviera un fondo contemporáneo y urbano.
Pero recordemos que esto no es precisamente nuevo, y la película de corte medieval Corazón de caballero (A Knights Tale) de 2001, innovó al presentar música de Queen o David Bowie en el soundtrack, el trailer y como sonido de fondo de algunas de las principales escenas. Sin embargo, aquella película protagonizada por el malogrado Heath Ledger era una comedia y Gladiador II se supone que es una película seria y con cierto rígor histórico.
De hecho, en YouTube se puede hallar una versión del trailer completamente reeditada que elimina el hip hop y lo sustituye con música añadida de Hans Zimmer, hecha por algún fan anarquista: «Not sure why they would use rap music in this… MUSIC», dice el mensaje del autor.
Pero desafortunadamente para los inconformes el rap no se queda ahí, ya que una campaña de Pepsi que se lanzó paralelamente a la película, es alusiva a la temática Gladiador y cuenta con la rapera Megan Thee Stallion a cargo. La campaña publicitaria se llama «Make Your Gameday Epic» y para que no quepa duda de su carácter oficial, fue producida por Ridley Scott Associates.
¿Qué dijo Russell Crowe sobre la secuela que lo hizo famoso?
En una entrevista con Variety, el actor que dio vida al primer y grandioso Gladiador en la primera película dirigida por Ridley Scott, Russell Crowe, dijo que se sentía “un poco incómodo” con Gladiator II” “Definitivamente hay un matiz de melancolía” y “celos”, aseguró. En otras entrevistas, Crowe de plano explotó y aseguró que estaba harto de que le preguntaran sobre la película, e incluso insinuó que «deberían pagarle» cuando lo cuestionan sobre el tema. Asimismo, aseguró que «nadie lo contactó nunca» para ser parte del filme.
Desafortunadamente para él, su personaje, por más disruptivo y taquillero que haya sido, había muerto heroicamente en la cinta original. Y no, el guion que presentó alguna vez el músico australiano Nick Cave en el que el personaje era resucitado por entidades divinas jamás fue tomado en serio, ¿cómo hacerlo si era francamente ridículo desde cualquier perspectiva?
La polémica con el rigor histórico de Gladiador II
Según The Hollywood Reporter, la película es una inconsistencia total con la historia real de la Roma de la época, comenzando porque en algún momento aparecen periódicos impresos en algunas escenas, cuando la cinta se desarrolla al menos 1,000 años antes de que se inventara la imprenta. Otro detalle que los analistas históricos observaron, fue que alguna de las escenas se muestran a rinocerontes en un Coliseo, cuando en la realidad ese tipo de especies nunca fueron habituales en esos escenarios y muchos menos, eran usados como animales de lucha. Ésa y otras licencias históricas que se tomaron los guionistas y el director de Gladiador II, han causado polémica.
Sin embargo, a favor del director, se tiene que admitir que se trata de un producto de entretenimiento y no un documental que deba ser estrictamente exacto con el contexto histórico, si eso no influye en la narrativa del relato. “Que vayan y hagan su propia película”, fue el mensaje que les envió Denzel Washington a los historiadores puristas, según reportó el diario As. Recordemos que en la cinta original, hay otros errores aún más graves, como que una extra aparece con una botella de agua plastificada o alguien que aparece portando unos jeans.
Denzel Washington acusa a la producción de acobardarse frente a ‘beso de la muerte’
«Besé a un hombre en la película, pero lo quitaron. Lo cortaron», aseveró el mismo Washington, de «Creo que se acobardaron», aseguró el actor en redes sociales. El histrión afroamericano de 69 años de edad, encendió la polémica al revelar que una escena de Gladiador II en la que se besaba con otro personaje masculino, fue censurada por la misma producción «Besé a un tipo en los labios y supongo que aún no estaban preparados para eso», añadió, antes de asegurar que a ese personaje, él mismo lo terminaba asesinando. una especie de beso de la muerte o de Judas debió ser. ¿Homofobia versión 2024?
Al respecto, la producción le contestó de forma genérica a Denzel para el medio TMZ: «La escena del beso y demás escenas improvisadas, terminaron eliminadas en la sala de montaje como una opción para la historia. No hubo prejuicios al tomar esa decisión», explicó esta fuente anónima.
Gladiador II sigue su camino como una de las películas más taquilleras del año y, pese a las polémicas, ha tenido una aceptación espectacular entre el público y la crítica, a diferencia de otras películas que prometían más, como la segunda entrega de The Joker y otras secuelas fállidas. ¿Nostalgia o destreza? El tiempo dirá si esta secuela se convierte en un nuevo clásico o se queda en una continuación aceptable y ya.
