El pasado 29 de noviembre, se estrenó un documental más sobre la legendaria agrupación británica que cambió el curso de la música y la cultura popular. Beatles ’64 explora el histórico momento en que el grupo originario de Liverpool aterrizó en NYC para llevar un poco de música, furor y deseo a una juventud que buscaba recuperarse del reciente magnicidio contra John F. Kennedy.
El desolador contexto de Beatles ’64
«Mi padre nunca pudo recuperarse del asesinatto de JFK, pero nosotros tras la llegada de los Beatles, logramos comenzar de nuevo a sonreir», dice una de las voces entrevistadas en el documental producido ni más ni menos que por el mítico cineasta Martín Scorsese, por los Beatles sobrevivientes: Paul McCartney, Ringo Starr, y por las viudas de John y George: Yoko Ono, y la ex esposa del guitarrista más jóven de la banda, la angelina de raíces mexicanas Olivia Harrison.
El documental genuinamente revive el momento en que unos Beatles, temerosos de cómo serían recibidos, vuelan de Londres hasta Nueva York para presentarse en el famoso show de Ed Sullivan. Si bien comedias románticas como I Wanna Hold Your Hand (1978), había captado la magia en formato de ficción nunca antes un documental con tan buena producción había retratado tan fielmente el arribo de los ingleses al nuevo mundo.
Las revelaciones del documental
El documental tiene la virtud, de revelar algunos muy elucuentes y desconocidos momentos, captados por la cámara de un reportero que estuvo con el grupo prácticamente cada minuto de su estancia. Además, ofrece datos que hasta el más erudito fan de los Four Fabs podría desconocer. Muy revelador cuando le preguntan a Paul si cree que su música llegue a tranformar la cultura y el responde que lo que hacen no es cultura, es sólo diversión.
Años después, el mismo Paul tendría que reconocer que tanto The Beatles, como Los Rolling Stones, también mencionados en el documental, darían forma a una nueva de cultura, una conocida como Cultura Pop, y que tenía que ver no sólo con chicas histéricas que perseguían a su grupo, sino con una forma de hacer arte que tenía que ver no sólo con saber qué acorde tocar, sino con conceptos que incluían la confección de una portada, las referencias y el reflejo ad hoc de todas las manifestaciones que la juventud del momento asimilaba. Eso dio como resultado también, álbumes disruptivos y algunos polémicos, porque atentaban contra lo establecido.
Las historias detrás de Beatles ’64
Lo interesante de este documental, es que aunque odies a Los Beatles —porque hay quienes suelen denostar la importancia de la banda—, encontrarás una serie de momentos que pueden ser apreciados. Entrevistas con personalidades como el director David Lynch, quien narra a la cámara cómo asistió al primer show de The Beatles en NYC sin tener idea de la trascendencia que estos tendrían, y que además reflexiona, sobre la belleza de la música en general y su importancia en la vida humana.
Además, se incluyen entrevistas de archivo —muchas nunca antes vistas— con John, Paul, Ringo y George, donde recuerdan la gran experiencia de conquistar Estados Unidos y llegar a NYC causando furor. El documental también analiza el comportamiento de las jóvenes fans que asolaban los hoteles donde el grupo se hospedaba, y narra el terror que la agrupáción tenía de visitar Estados Unidos al considerar que el país era «muy violento».
«Que se pudra Elvis, The Beatles son mejores», dice una de las chicas entrevistadas en ese 1964 en riguroso blanco y negro. También hay testimonios de antiguas fans, hoy respetables escritoras o artistas, que confiesan que en su momento, llegaron a comprar pedazos de toalla que se ofrecián afuera de los hoteles donde los fans peregrinaban, y que supuestamente habían sido usadas por los Beatles.
Sin duda, un recomendable documental, y con una producción impecable, que cuenta una historia que ya habíamos escuchado, pero que agrega elementos a la leyenda, como por ejemplo, la del joven norteamericano que viajó a Liverpool de polizonte en un barco en los años 60 para seguir el hype y la efervescencia que se vivía en aquellos rocaroleros lares, y que luego fuera deportado, llamando la atención de los medios locales.
Muchos años después, ya convertido en ingeniero de sonido a fines de los 70, el susodicho conoce a John Lennon en un estudio de grabación, le dice quién es y por qué había viajado a Liverpool en esos años. Lennon lo reconoce de haberlo visto en el diario de su ciudad en su juventud y la anécdota que le precede, es otro de los grandes momentos de Beatles ’64.