Bebe Reno Netflix portada Bebe Reno Netflix portada

Claves del éxito de la serie Bebé Reno de Netflix

Basada en la vida real, es una historia de desamor y obsesión llevada al extremo. La singularidad de los personajes de  Bebé reno son tan lejanos y a la vez tan reconocibles en la gente que nos rodea y hasta en nosotros mismos.

Bebé Reno, la serie viral de Netflix es un adictivo viaje de emociones engañosas que comienza como una morbosa comedia de humor negro —y políticamente incorrecto—y que pronto, se convierte en una dramática pesadilla en streaming que atrapa a lo largo de 7 capítulos que se debaten entre el cringe y las risas incómodas, y nos restriegan en la cara que los sueños no siempre se convierten en realidad de la forma en que quisiéramos. Y sí, se vale sentir pena (ajena y no ajena).

De qué trata y porqué todo mundo habla de Bebé Reno

Básicamente, es una historia de desamor y obsesión llevada al extremo. La singularidad de los personajes de  Baby Reindeer—su título original—, tan lejanos y a la vez tan reconocibles en la gente que nos rodea y hasta en nosotros mismos. Consigue ese efecto de empatía —y en algunos momentos de total rechazo, hay que decirlo— que hace que una historia se vuelva inolvidable, para bien o para mal. Una serie digna de memes, pláticas de sobremesa y análisis en las redes sociales.

El relato, una suerte de chick flick a la inversa, cuenta la aparentemente apacible vida de Donny Dunn (interpretado por Richard Gadd, a quien le sucedió esta historia en la vida real y que además escribió la serie en la que está interpretándose a sí mismo). Un tipo sin mucho talento histriónico que lucha por hacerse de un nombre en el mundo de la comedia, mientras sobrevive trabajando como bartender en un modesto bar londinense (y que vive en la casa de la mamá de su ex novia, el cliché del loser). Su vida da un giro cuando al bar llega una mujer llamada Martha —una muy efectiva Jessica Gunning— quien asegura ser una exitosa abogada… que no tiene ni para pagarse un té (y ahí se encienden los focos rojos y todos somos testigos). La bola de nieve obsesiva comienza a rodar cuando Donny decide ser amable con ella, le invita su bebida y muestra un interés amistoso genuino. Ése, es el primer punto de inflexión que arrojará al vacío a nuestro inestable protagonista y lo llevará al borde de una crisis existencial que nos hace reflexionar sobre el peso de buscar la fama, las decisiones equivocadas y sobre todo, de esa terrible soledad consecuencia del mundo moderno y de confundir la realidad con lo que pasa en una red social en esta era de IA.

¿Por qué nos identificamos con Bebé Reno?

Bebe reno Donny Dunn
Donny Dunn – imagen creada por IA

Una de las cualidades de Bebé Reno, es que si bien está claro que el personaje de Martha es el de una mitómana con problemas emocionales que la convierten en una acosadora; conforme avanza la trama, descubrimos (además de que ella ya está fichada en la policía por acciones previas similares) que el personaje de Donny también sufre de un desorden  mental y afectivo que lo convierte de dependiente de esa actitud tóxica y obsesionada.

Justo a la mitad de la serie, las situaciones por las que atraviesan los personajes dejan de ser de comedia —ácida— de enredos, y el relato se convierte en una película de terror sicológico en la que todos tienen algo de culpa ya sea por seguir al pie de la letra el manual de la villanía (el personaje de Martha se parece un poco al de Annie, de la novela Misery de Stephen King, tanto que el mismo escritor ya habló el respecto  sobre ese mismo tema) o por victimizarse por no saber escapar a tiempo y que las risas iniciales se conviertan en una tragedia donde el abuso sexual y enfermedades mentales protagonizan algunos de esos momentos difíciles de ver en la serie. Y es que el personaje de Donny decide seguir con el juego de su acosadora, alimentado por la admiración enfermiza de ésta y sometido a ser rémora de esa energía que su alter ego de comediante fracasado no logra obtener de ese público indiferente del que tanto anhela un reconocimiento.

Sí, “aceptación” se llama el asunto, y en ese sentido, todos hemos querido encajar alguna vez en la vida y por eso podemos identificarnos (sin llegar a los extremos) ya sea con Donny o con Martha (y más cuando al final de la serie, se nos revela el porqué el apodo de Baby Reindeer.

¿Quién es el verdadero villano de Bebé Reno?

Pero además, en la ecuación aparece otro personaje mucho más siniestro, que ha sido muchas veces retratado y exhibido —sobre todo en la era Me Too— pero poco visualizado cuando el abuso es hacia el género masculino; recordemos que nadie le creyó a Corey Feldman cuando aseguró en un documental que Charlie Sheen abusó de su amigo Corey Haim en los años 80. El personaje de Darrien O’Connor es el verdadero villano de la serie. Se trata de un productor televisivo que se declara como pansexual en algún momento, y que abusa sicológica y físicamente de Donny con el clásico gancho de poder hacerlo famoso en el aún glamuroso mundo de la TV.

Curiosamente, aunque fue engañado en su momento, nuestro protagonista logró finalmente ese objetivo al materializar su extraña historia, pero muy lejos de sus expectativas iniciales (en el camino, descubrió que era bisexual). A eso, se le llama sacar ventaja criminal (en el buen sentido) de las desgracias y capitalizarlas, y ese sería otro mensaje: no hagas terapia, escribe una serie.

En la vida real, Tanto “Darrien” como “Martha”, han tratado de ser relacionados con distintos personajes, pero el mismo Richard Gadd ha admitido que pese a que la serie se basa en hechos que sí sucedieron, el show tiene un tratamiento de ficción, y por ello, por ningún motivo revelará las verdaderas identidades de estos personajes (que han sido asociados sin confirmación alguna con el productor inglés Sean Foley y la supuesta “Martha” de la vida real: Fiona Harvey, una abogada escocesa de 58 años quien ya ha dado varias escandalosas declaraciones asegurando ser la inspiración del personaje). 

¿Ella es la verdadera Martha de Bebe Reno?

Martha Bebe Reno
Martha – imagen creada por IA

Lo cierto es que recientemente, justo esta abogada escocesa de 58 años de edad llamada Fiona Harvey dio la cara asegurando ser la “Martha” en la que se inspiró Bebé Reno. Según reportó el Daily Record de Inglaterra, la “verdadera Martha” ya declaró que la serie “es un montón de basura” y que las cosas no sucedieron así (declaraciones que se esperarían de la “Martha” que vimos en la serie). Además, GQ reportó que la mujer no tuvo más remedio que dar entrevistas y revelarse ante el mundo (y lo haters), debido a que “los detectives de internet” dieron con ella y que incluso, hasta la amenazaron de muerte. No cabe duda que la realidad ha superado la ficción.

Y así, como la vida misma suele ser a veces, Bebé Reno no es una serie fácil de digerir, pero sí muy fácil de ver y se puede completar en una sola sesión nocturna o de fin de semana. Te garantizamos algunas risas si es que eres un poco sádico, pero sobre todo, momentos  perturbadores. La serie está muy bien confeccionada en cuanto a dirección de arte y además, destacan los personajes secundarios: los papás del protagonista, la novia trans, los amigos misóginos del bar, la ex y hasta el público que asiste al patético show de stand up del protagonista, que tal como nosotros, se queda perplejo más de una vez con lo que está viendo.