En los diferentes dispensarios que existen en países como Canadá, Estados Unidos o en Países Bajos, generalmente las flores de cannabis se clasifican a partir de sus cepas. Las cepas de cannabis se clasifican comúnmente en tres categorías: índica, sativa e híbrida.
Aunque muchos creen que estas clasificaciones pueden predecir los efectos de una cepa, la comunidad científica está adoptando una comprensión más matizada basada en los cannabinoides y terpenos, los compuestos que conforman el perfil químico de una cepa. En esta guía, te explicaré las diferencias entre las cepas índica y sativa, así como la utilidad de ambos sistemas de clasificación y la importancia de los cannabinoides y terpenos.
Indica vs. Sativa: Comprendiendo lo esencial
Las cepas de cannabis generalmente se han clasificado en tres categorías según los efectos reportados por los consumidores. Por un lado, las cepas de cannabis índica suelen asociarse con una sensación de relajación y sedación, lo que las convierte en la opción ideal para disfrutar de una película y liberarse del estrés cotidiano.
Por otro lado, las cepas sativa se distinguen por brindar energía y estimulación, haciéndolas adecuadas para actividades físicas, eventos sociales y proyectos creativos. Por último, las cepas híbridas proporcionan una combinación de efectos de índica y sativa, lo que les otorga un equilibrio singular.
Aunque las clasificaciones de cannabis como índica y sativa son ampliamente reconocidas por los consumidores, es crucial considerar que no siempre predicen con exactitud los efectos de una cepa específica. Esto se debe a que la denominación de índica y sativa se basa en la botánica y describe la estructura física de la planta, en lugar de los efectos que produce. Además, la química individual de cada persona puede influir en cómo las cepas afectan a cada individuo, lo que genera experiencias distintas para cada usuario.
Por consiguiente, muchos dispensarios están adoptando un enfoque más apropiado para clasificar el cannabis, enfocándose en el perfil químico de la planta. Este método se basa en el análisis de los cannabinoides y terpenos presentes en el cannabis.
Este cambio se lleva a cabo porque los terpenos y cannabinoides, que son abundantes en la planta de cannabis, pueden predecir con mayor precisión las sensaciones que producen las cepas. Con más de 100 cannabinoides y aproximadamente 200 terpenos presentes en el cannabis, es la combinación única de estos compuestos la que determina los efectos específicos que el consumidor puede experimentar.
Este nuevo sistema de clasificación permite a los usuarios identificar mejor qué cepas pueden ser más adecuadas para sus necesidades, lo que les proporciona una experiencia más personalizada y adaptada a sus preferencias y objetivos.
Cannabinoides y Terpenos: La clave para entender el cannabis
Las cepas de cannabis tienen perfiles químicos únicos que interactúan de manera diferente con la química corporal de cada individuo. Si bien el modelo de índica/sativa/híbrido ofrece una comprensión básica de los posibles efectos de una cepa, un método más complejo y específico implica examinar la mezcla de cannabinoides y terpenos de una cepa.
Los cannabinoides, como el THC y el CBD, son los compuestos químicos responsables de los efectos psicoactivos y medicinales del cannabis. Los terpenos, por otro lado, son compuestos orgánicos volátiles que le dan a cada cepa su aroma y sabor característicos. También se ha descubierto que influyen en los efectos del cannabis, ya que interactúan con los cannabinoides y modulan sus efectos.
Cómo utilizar el método de Índica, Sativa e Híbrido
Al elegir una cepa, la clasificación de índica/sativa/híbrido puede proporcionar una idea general de sus efectos. Las índicas a menudo se recomiendan para relajación, las sativas para productividad y las híbridas para una combinación de ambas. Si bien este método no es exacto, puede ayudar a los consumidores a tomar una decisión informada al seleccionar una cepa.
Cómo utilizar el método de Cannabinoides y Terpenos
Los cannabinoides y terpenos son fundamentales para determinar los efectos de las diferentes cepas de cannabis, proporcionando una mejor comprensión de sus propiedades que la clasificación tradicional de índica y sativa. Las cepas de cannabis se pueden describir con mayor precisión según su perfil químico, que incluye tres tipos: Tipo I (alto THC, bajo CBD), Tipo II (THC y CBD equilibrados) y Tipo III (alto CBD, bajo THC). Además, los terpenos presentes en las cepas de cannabis pueden influir en sus efectos.
Para elegir una cepa de cannabis basada en el método de cannabinoides y terpenos, es importante tener en cuenta factores como la tolerancia, la dosis, la química del cuerpo, el entorno, el método de consumo, el historial médico, estado de ánimo y la experiencia deseada. Utilizar bases de datos de cepas de varios distribuidores o dispensarios y llevar un registro de las cepas favoritas y menos preferidas también puede ser útil para descubrir nuevas cepas con niveles similares de cannabinoides y perfiles de terpenos.
Combinando ambos modelos para una elección precisa
Al fusionar los métodos de índica/sativa/híbrido y cannabinoides/terpenos, los consumidores pueden obtener una visión más completa de las cepas de cannabis y sus efectos. Este enfoque combinado permite tomar decisiones más informadas y personalizadas al seleccionar una cepa, considerando tanto las clasificaciones tradicionales como los perfiles químicos específicos.
Integrando enfoques y fomentando la educación para una selección personalizada y eficiente de cepas de cannabis
Tanto el modelo de clasificación indica/sativa/híbrido como el análisis de cannabinoides y terpenos ofrecen valor al entender las cepas de cannabis. Mientras el enfoque de índica/sativa/híbrido brinda una perspectiva general, el modelo de cannabinoides y terpenos permite una comprensión más precisa y adaptada a las necesidades individuales. Al combinar ambos enfoques, los consumidores pueden tomar decisiones informadas y seleccionar las cepas más apropiadas según sus preferencias y requerimientos personales.
La educación juega un papel fundamental en el consumo responsable y seguro de la planta de cannabis. Conocer los diferentes perfiles químicos, así como los efectos y propiedades de cada cepa, permite a los usuarios tomar decisiones conscientes y personalizadas.
La difusión de información científicamente respaldada sobre los cannabinoides, terpenos y métodos de clasificación es esencial para romper estigmas y promover un entendimiento más amplio y matizado del cannabis. Al fomentar la educación y el conocimiento en este ámbito, los consumidores estarán mejor preparados para elegir y utilizar cepas de cannabis de manera adecuada y beneficiosa para sus necesidades específicas.
