La desdolarización es el proceso a través del cual el sistema financiero global disminuye su dependencia en el dólar americano (USD) como moneda de reserva de valor y/o de intercambio. Si bien esto parece imposible dada la configuración y aparente solidez del sistema dolarizado, hay señales de que es un proceso lento y gradual que tendrá implicaciones a largo plazo. Estas son las 4 señales de que la desdolarización ya está sucediendo.
1. Tensiones Geopolíticas
La tensión geopolítica entre Rusia y Occidente a partir del conflicto Rusia-Ucrania parece ser causa de que el bloque conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica (BRICS) comience a coquetear con la idea de la creación de una nueva moneda respaldada por oro para reemplazar el dólar. Si bien aún no existen planes formales para la creación de dicha moneda, si parece ser un objetivo de mediano a largo plazo. ¿Será esta nueva moneda un tema central durante la próxima reunión de jefes de Estado BRICS programada para Agosto del 2023?
2. Bancos Centrales aceleran compra de oro
De acuerdo a investigaciones publicadas por el Consejo Mundial del Oro (WGC, por sus siglas en inglés), los bancos centrales alrededor del mundo han incrementado su actividad en la compraventa del metal precioso. De hecho, 7 de 10 bancos centrales planean incrementar sus reservas de oro en los siguientes 12 meses. Según esta misma fuente, los bancos centrales de países emergentes son los que lideran la narrativa y esto ha dinamizado el precio del oro desde finales del 2022.
3. Bitcoin fuerte a pesar de ataques
Independientemente del bear market y a pesar del escrutinio regulatorio por parte de las autoridades estadounidenses para con todo el sector de criptomonedas y blockchain, Bitcoin se ha apreciado alrededor de un 80% con respecto al dólar en la primera mitad del 2023. Después de tantos ataques a lo largo de su historia, la moneda digital permanece como una alternativa para preservar el valor.
4. Brasil y China “yuanizan” el comercio
A partir de 2023, las transacciones comerciales entre Brasil y China dejarán de establecerse en dólares y se utilizará el par yuan/real. Si bien estas transacciones representan apenas una pequeña parte de todo el comercio internacional, la idea de la desdolarización ha ganado momentum entre líderes políticos del continente africano.
Aunque la desdolarización parece imposible gracias a la configuración del sistema de interconexiones comerciales y la aparente solidez del dólar americano, es importante notar que la descentralización financiera no es un “evento de cisne negro” sino más bien un proceso lento y gradual que, según JP Morgan, “ya comienza a mostrar señales emergentes de que está sucediendo”.
