Si hay algo que nos dejó la pandemia por Covid-19 fue el adaptar nuestro estilo de vida para tener lo más parecida la realidad a la que estábamos acostumbrados a nuestro alcance y el trabajo no fue la excepción. Si bien es cierto por que debíamos estar lo más distanciados posible, gracias a las diversas tecnologías y el internet pudimos estar más conectados que nunca.
De esta manera es que surgió el home office, concepto laboral que tomó gran fuerza cuando tuvimos que aislarnos y quedarnos en casa para evitar seguir propagando el virus y así evitar contagiarnos. Debido a esto las oficinas tuvieron que trasladarse a los hogares.
¿El home office tiene los días contados o solo se transforma?
Sin embargo, con el fin de la pandemia, para muchos esta reciente modalidad laboral está por llegar a su fin. Pues gerentes y directivos temen perder autoridad o dejar de “controlar” a las personas, dado que no hay un espacio físico en el que tengan contacto para estar más de cerca supervisando a sus subordinados, por lo que prefieren regresar al trabajo presencial.
Para otros, el trabajo híbrido gana más terreno, ya que también se debe tomar en cuenta que el “desacostumbrar” a los empleados de trabajar a distancia puede ser un arma de doble filo, puesto que hay quienes consideran que el estar en casa o en cualquier otro lugar del que pueden cumplir perfectamente los de manera remota los objetivos planteados en su puesto.
Lo que les permite sobrellevar un mejor balance de su vida personal vs su vida laboral, aunado a que se evitan o reducen traslados, así como otros gastos que se derivan.
Por lo que varías compañías han tratado de mantener vigente esta modalidad y así han logrado mandar un mensaje de flexibilidad a sus colaboradores para no perder la productividad, lealtad y crecer la organización por la vía de la competitividad a través de equipos que se sienten apoyados y no sometidos.
«Creo que definitivamente uno de los peores errores de la industria de la tecnología en mucho tiempo fue que todos pensaban que podían trabajar de forma remota para siempre, y las nuevas empresas no necesitaban estar juntas”, indicó Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, creador de la IA ChatGPT, en un foro haciendo alusión además que, el home office puede crear confusiones, mientras que los empleados que acuden a una oficina obtienen mejores productos.
Amazon, es otra empresa que se rige bajo esta consigna, pues para la compañía fundada por Jeff Bezos es más fácil aprender, modelar, practicar, fortalecer la cultura corporativa, colaborar e inventar de forma más sencilla y efectiva, mediante el trabajo presencial. Esto deja en una encrucijada a muchos que se resisten en regresar a los espacios físicos por las facilidades y bondades que les dejaba el trabajo en línea.
Por su parte, Arvind Krishna, CEO de IMB agregó que el home office pone en riesgo el futuro del desarrollo profesional de los jóvenes, debido a que quedarían encasillados a no traspasar más allá de una pantalla. Krishna comentó que esto limitaría su potencial y posibilidad de crecimiento profesional para hacerse de puestos gerenciales, lo que los perjudicaría de alcanzar sus metas, sobre todo a los que buscan ser líderes.
No solo cambió la manera de trabajar, sino la ley en México
Así como las empresas tuvieron que adaptarse, la ley también sufrió cambios, por lo que en enero de 2021 entraron en vigor las reformas al artículo 311 de la Ley Federal del Trabajo en materia de teletrabajo o home office, el cual es aplicable para los trabajadores y empleadores en la República Mexicana.
Entre las disposiciones legales de este ordenamiento se indica que las relaciones laborales que se desarrollen en más de un 40% del tiempo en el domicilio de la persona trabajadora por la modalidad de teletrabajo deben establecer un convenio por escrito.
Aunque éste puede ser reversible y si el patrón o la parte contratante en algún momento decide que la modalidad a distancia ya no es conveniente, el trabajador debe acudir de manera presencial a donde la compañía lo indique.
En tanto que, el 15 de julio de 2022 surgió la Norma Oficial Mexicana (NOM) 037, la cual regula el teletrabajo y busca proteger a los colaboradores, brindándoles las condiciones necesarias para desarrollar su trabajo y así prevengan enfermedades y accidentes mientras realizan sus actividades remotas.
No obstante, la realidad es que entre las necesidades de los trabajadores que laboran de esta forma requieren les sean cubiertos de manera proporcional varios gastos necesarios para realizar su trabajo remoto.
Algunos de esto son: acceso a internet, servicio eléctrico, equipos de cómputo con servicios óptimos de video y audio, silla ergonómica, lo cual no todas las empresas están dispuestas a ofrecer o bien, no tienen las condiciones para proporcionarlo, por lo que prefieren que su plantilla acuda de manera presencial.
En cuanto a las personas trabajadoras bajo la modalidad de teletrabajo, también deben hacer lo necesario para que éste se lleve a cabo de la mejor manera, por lo que entre sus responsabilidades está informar sobre los cambios de domicilio del lugar de trabajo y aplicar periódicamente mediante visitas de constatación, la lista de verificación de condiciones de seguridad y salud para el trabajo remoto.
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el 23% de los empleos en México pueden realizarse desde casa, lo que coloca a 13 millones de trabajadores en esta modalidad de teletrabajo.
No obstante, este país encabeza la lista global en términos de estrés laboral, seguido por China con un 73%, y Estados Unidos con un 59%, de acuerdo a datos de la OMS. Esta situación insta a los empresarios a analizar de manera crítica las prácticas laborales actuales, ya que estos niveles de estrés pueden afectar drásticamente los objetivos o metas de sus organizaciones.
- Ventajas y Desventajas del Home Office
- Ventajas
- Mayor independencia y libertad.
- Disponibilidad de tiempo.
- Promueve la creatividad y productividad.
- Ahorro tanto económico por consumo de alimentos como de tiempos de traslados.
- Sostenibilidad.
- Posibilidad de contratar a colaboradores de cualquier lugar.
- Desventajas
- Dificultad para concentrarse.
- Cuesta desconectarse.
- Patrones creen que “no trabajan”.
- Línea delgada entre vida personal y profesional, pues puede “ahogarse” la una con la otra.
- Falta de orientación.
- Caer en aislamiento.
¿Qué dice Latinoamérica?
El 53% de las personas encuestadas en un estudio de “El mundo del trabajo de hoy” mencionaron que se sienten más felices teletrabajando porque pueden llevar un mejor equilibrio en su vida profesional y personal. El 22% indicó que puede concentrarse más realizando sus labores desde casa y un 50.6% dijo que siguen trabajando desde su hogar, lo cual nos muestra que todavía hay gran cantidad de empresas con esta flexibilidad.
Pese a que vemos que sí se puede, hay que considerar las regulaciones adoptadas por cada país, el impacto en sus economías y las dinámicas de trabajo adoptadas por sus plantillas de acuerdo a las necesidades de cada compañía.
Además, es necesario no confundir el home office del teletrabajo, pues el primero puede ser esporádico, mientras que el segundo es un modelo permanente.
Y tú, ¿con cuál te quedas?
