A 6 meses de su lanzamiento Quibi quebró bajo los egos de los fundadores. La plataforma de contenido streaming para móvil que fue lanzada el 6 de Abril del 2020; por Jeffrey Katzenbert ex directivo de los estudios de Walt Disney y Meg Whitman, ex CEO de eBay y HP; se vió en un aterrizaje forzoso después de ser tan promocionada. Tras levantar $1.8 billones de dólares ($1.800 millones) y ser apoyada por estrellas de Hollywood como Steven Spielberg y Guillermo del Toro, Quibi fracasó colosalmente. ¿Qué paso?
- Las personas que encabezaban Quibi, ignoraron los principios básicos de una startup: elige el equipo correcto, gasta poco, falla rápido y barato.
- Presenciamos una batalla generacional y cultural entre los Boomers [C-Suite] y Centenials [Startup].
- El punto de quiebre fue la falta de entendimiento de la estructura y funcionalidad de una startup, por parte de sus fundadores.
- Intentaron de todo. Los directivos redujeron su salario 10% para evitar despidos; redujeron el volumen de contenido, y nada pudo salvarlos. Ahora, están considerando vender el contenido y tecnología.
Quibi en resumen
Plataforma de contenido streaming (solo contenido original) exclusivo para celular, con series, películas, realities, noticias con episodios “Quick bites “ o “bocados rápidos” de 10 minutos.
Descargas la app desde quibi.com, accedes a prueba gratuita durante 90 días. La app estaba disponible solo en Inglés, limitada a sugerencia de un carrusel de 22 programas; sin acceso a una panorámica global de contenidos.
Ofrece dos planes mensuales: $4,99 usd (con anuncios) o $7,99 usd (sin anuncios).
Películas, noticias del día, series de géneros como el thriller o la comedia, que permiten la dosificación en píldoras rápidas. Lo mejor del catálogo: Most Dangerous Game, Dishmantled, Flipped, Memory Hole, When the Streetlights Go On, You Ain’t Got These,& Music, survive
Uso exclusivo para celular, se puede utilizar con video horizontal y vertical para adaptarse mejor al usuario de móvil a través de la tecnología Turnstyle.
Sus principales errores fueron lanzar la aplicación como una película y no como una Startup, sueldos excesivos, producciones caras e incentivos financieros con socios de contenidos incorrectos. No entendieron a su público objetivo, las nuevas interacciones en dispositivos móviles y no calcularon el riesgo de lanzamiento durante el confinamiento de COVID-19.
¿Porqué Quibi fracasó?
Lanzaron la aplicación como una película y no como una Startup.
Con ex-ejecutivos de grandes compañías, quisieron operar como tal, con sueldos elevadísimos, producciones caras gastando hasta $100,000 usd por minuto; en 175 programas originales protagonizados por estrellas como Chrissy Teigen, Chance the Rapper, Anna Kendric. Quibi creó incentivos financieros desalineados con socios de contenido equivocados. Invirtió en figuras que imaginaron podrían gustar a los jóvenes, como Jennifer López, Idris Elba, Tyra Banks, Usher. A Reese Witherspoon le pagaron 6 millones de dólares por narrar un documental de Cheetahs. En lugar de invertir en influencers, estrellas de YouTube, Instagram o TikTok; que atraen a la audiencia joven actualmente.
70% de los adolescentes suscritos a YouTube indican que se relacionan más con creadores de YouTube que con celebridades tradicionales.
Estudio thinkwithgoogle.com
No entendieron al público objetivo
En TikTok los usuarios generan contenido fácilmente y lo comparten al instante, generando contenido viral. Netflix genera un flujo de contenido atractivo que genera viralidad en la cultura pop.
Quibi queda en el medio, con contenido mediocre, un formato exclusivo para célular. Sin capacidad de transmisión en dispositivos como Apple TV, Roku, Amazon.
Los usuarios no pueden compartir o realizar screenshot y las series cortas no cumplen con las expectativas del público. Quibi fue pensado para público de Hollywood; sin entender cómo la audiencia moderna ve televisión o consume contenido.
No calcularon el riesgo de lanzar durante el confinamiento COVID-19
Katzenberg culpa al COVID-19 por el quiebre de Quibi. En parte tiene razón, Quibi planeaba llenar tiempos muertos del día con entretenimiento breve. Pretendían distraer a los espectadores durante la jornada fuera de casa; en el transporte público o en la pausa del trabajo. Experiencias que pocos vivimos a partir de marzo.
El confinamiento cambió los hábitos de consumo de los usuarios; nos llevó a un mayor consumo en pantallas grandes al estar en casa. Quibi no contaba con una versión para ver contenido en TV; Chromecast , apple TV, etc.
Quibi nunca logró llegar a los números proyectados
La meta era atraer 7.4 millones de suscriptores de pago al final de año; Quibi no logró ni el 30%, solo consiguió 2 millones de suscriptores. De acuerdo al reporte The Wall Street Journal los picos de descarga diario fueron de 379,000 en su lanzamiento en Abril; nunca excedieron los 20,000 en un día para Junio.
Quibi no analizó el papel central de la interactividad en el entretenimiento nativo para dispositivos móviles.
Las demandas, la pandemia, el bajo interés del lanzamiento, las limitaciones técnicas, la mala prensa, decepción tras decepción los llevó directo al fracaso.
Desde su creación, su nicho no fue claro, quibi se enfocó a «momentos muertos del día»; los cuales ya están saturados por las redes sociales. No parecía encajar con la demanda de contenido.
Claramente no era competencia para Netflix, YouTube y TikTok, pero tampoco revolucionó la industria streaming. Series demasiado cortas para un público que gusta de “Maratón de Series”, y contenido exclusivo para móvil; que no se puede compartir como en Tik Tok o YouTube, que además son gratuitos. Su membresía resultaba cara considerando el valor entregado al usuario.
¿Qué podemos aprender de Quibi?
La C-suite debe transformarse o podría detener el crecimiento de las startups
El fracaso de Quibi se convierte en un caso de estudio; un ejemplo de las fallas no permitidas en una startup. Emprendedores de Sillicon Valley, nos han enseñado como las fallas son aprendizaje, fallar es válido. Pero, cuando lo haces desde la base, no hay vuelta atrás. Ni los mejores currículums, la tecnología y el dinero podrán salvarte.
Las personas que encabezaban Quibi, ignoraron los principios básicos de una startup: elige el equipo correcto, gasta poco, falla rápido y barato. Presenciamos una batalla generacional y cultural entre los Boomers [C-Suite] y Centenials [Startup]. El punto de quiebre fue la falta de entendimiento de la estructura y funcionalidad de una startup, por parte de sus fundadores.
Quibi fue una gran idea y nadie quería que tuviera más éxito que nosotros. Nuestro fracaso no fue por falta de intentos; hemos considerado y agotado todas las opciones disponibles para nosotros.
Katzenberg y Whitman
Deben derribarse viejas estructuras, donde los altos ejecutivos son alabados, intocables e incuestionables. Donde se dan resultados a costa de la experiencia del cliente, el foco está en los números y no a quien va dirigido. Abrirse paso a una estructura horizontal de colaboración, enfoque humanizado y centrado en el usuario, sensibilizarse ante los cambios, las necesidades, problemas a resolver y adaptarse.
Conclusión
Una startup manejada como un gran corporativo, donde las finanzas, estrategias y modelo de negocios están ya establecidos; sin entender el mercado y entorno al que va dirigido el producto y/o servicio, está destinado al fracaso.
Prepárate para lo peor y actúa rápido. Queda claro que no se trata de dinero y fama, se trata de pasión, liderazgo , entendimiento claro de qué va a solucionar tu Startup. Tener clara la dirección de hacia donde vas. Los resultados se van dando, a prueba y error.
